Termostato digital
Y nos permitirá racionalizar el consumo eléctrico al poder regular la temperatura sin excesos y sólo en los momentos en los que la estemos usando.
Ya vimos en el post anterior cómo mantener un calefactor. Seguiremos con el tema de la climatización doméstica y hoy vamos a hablar de un interesante aparato: el termostato digital o cronotermostato.
Es un aparato que nos permitirá regular la temperatura de una habitación conectándolo a un aparato de aire acondicionado o un calefactor.
Según lo programemos, servirá para el frío o para el calor y también podremos programarlo para que en determinadas horas la temperatura sea más o menos elevada que a otras. Y por supuesto… muchos programas que podremos seleccionar para no tener que estar programando continuamente.
Y También tiene otras funciones adicionales, como la tecla “manual” que permite poner otra temperatura diferente a la programada de modo temporal, sin anular la programada; La función de espera, que nos permite que el aparato espere uno o dos minutos antes de conectarse tras el apagado y que permite que el aparato que regula no trabaje más de la cuenta…
Normalmente, se utiliza dejándolo fijo en la pared y conectándolo directamente a la red, para lo cual sólo hay que taladrar en el lugar deseado en los lugares que la plantilla que trae indica, meter los tacos y atornillar el aparato… Yo he hecho una variación:
Lo he conectado como si se tratase de un alargador con un interruptor, sólo que en vez de interruptor he conectado el termostato. Esto tiene sus ventajas y sus inconvenientes:
La principal ventaja es que si queremos regular la temperatura de una habitación, tenemos el termostato totalmente transportable: solo tenemos que enchufarlo en otra habitación y listo.
También permite colocarlo cerca de donde estemos. Así el termómetro del termostato detectará la temperatura del lugar cercano a nosotros y no de la otra punta de la habitación, obteniendo más bienestar.
El principal inconveniente es que al estar montado de forma portátil, es susceptible de recibir algún golpe que pueda romperlo.
Me diréis que no le veis ventaja alguna a este aparato, ya que los calefactores suelen tener termostato incorporado y los aires acondicionados también…
Pero con este aparato lograremos un control de la temperatura más preciso, sobre todo para la calefacción, ya que los calefactores tienen el termostato muy cerca de la resistencia y más que medir la temperatura ambiente, miden la temperatura del aparato.
Y, por supuesto, podremos poner cualquier tipo de estufa por sencilla que sea y aunque no tenga termostato, nuestro termostato se encargará de encenderla y apagarla cuando sea preciso.
Incluso en verano, podéis conectarlo de noche a un ventilador de modo que cuando refresque al avanzar la noche, se desconecte y se vuelva a encender si la temperatura sube de nuevo…
El costo de estos aparatos suele ser muy bajo… el mío me costó unos 6€ y como podréis ver tiene ya su uso…
Para instalarlo como alargador sólo tenéis que haceros con un alargador o bien fabricároslo vosotros mismos con un cable del grosor adecuado al uso que le vais a dar y conectando una clavija hembra en un extremo y otra macho en el otro. Tendremos que pelar una sección de la funda y cortar uno de los polos que será donde hagamos el empalme.
También podéis usar dos trozos de cable independientes conectando las clavijas en los extremos y en el otro se conecta el termostato. Yo he conectado el aparato de esta segunda forma.
Cortáis uno de los cables y lo conectáis a los dos bornes o conectores. Si usáis dos trozos de cable, el cable que no actúa en el corte de la electricidad lo ponéis unidos al tercer borne, o si no tuviera más que dos bornes, los unís entre sí.
Una aclaración: el termostato actúa como un interruptor y como tal, sólo corta un polo de la corriente, de ahí que sólo veamos tres conexiones: dos son para un cable del mismo polo, que se conecta o desconecta con el programador y el tercero es para conectar el otro polo de la corriente, caso que el cable esté cortado: se unen los dos trozos a este tercer borne, como os dije antes.
Yo, para mayor seguridad, he sujetado los cables al chasis del termostato mediante un alambre:
A través del compartimiento de la pila hay un orificio que serviría para fijarlo a la pared. Lo aprovecho para insertar por ahí el alambre y que los cables no queden colgando sólo de los bornes. Y así minimizo el riesgo de que se salgan de éstos.
Y ya sólo queda insertarle las pilas, ponerle la hora y el día y empezar a programarlo.
El mío tiene 10 programas de fábrica que no se pueden modificar, pero tiene otros tantos que podemos programarlos a nuestro antojo.
Puede parecer al principio un poco complicado, pero es facilísimo y se le coge el truco enseguida.
No os voy a describir cómo se programa éste, porque cada uno puede tener su propia forma de hacerlo y el mío no es precisamente muy moderno. Sólo basta que os leáis las instrucciones del vuestro y así no tendréis problema…
Ahora podremos tener la casa calentita en invierno cuando lleguemos a casa, tener la habitación caldeada cuando vayamos a levantarnos o simplemente, podemos usar una estufa o calefactor más económico, que no lleve termostato incorporado, sin riesgo de que se caliente más de la cuenta y salga ardiendo.